Lava bien y corta el zapallito en cubos medianos. Reserva.

Corta la carne en cubos más o menos del mismo tamaño que los zapallitos. Calienta una sartén antiadherente con el aceite, y espera hasta que al acercar tu mano sientas el calor que emana de la superficie. Cuidado de no quemar el aceite!

Agrega la carne para sellarla bien y retírala del sartén. Reserva.

Luego, agrega los zapallitos y saltéalos hasta que se vean tiernos. Una vez listos, añade la carne y revuelve todo súper bien. Agrega sal, pimienta y ajo en polvo a gusto.

En un bowl chico, mezcla la fécula de maíz con un poco de agua (apenas la cantidad necesaria para disolverla) y revuelve bien. Agrégala a la sartén y, sin dejar de revolver, espera a que el jugo de la cocción se espese.

Una vez listo, ya puedes disfrutar tu plato! Acompáñalo de spaghettis/espirales de legumbres, arroz integral, polenta, quínoa, o lo que prefiera