Para la masa: Mezcla todo en un bowl, amasa y estira la masa con un rodillo (uslero). Pon la masa sobre un molde de pie/tarta, idealmente que tenga base desmontable. Cocina 10 minutos en horno a 180ºC (355ºF).



Para el relleno: Corta en pluma la cebolla, los champiñones en rodajas y las espinacas finamente. En una olla con agua caliente cocina 3 minutos el choclo. Drena el agua y reserva.

Calienta una sartén con un poco de aceite de oliva o de coco. Saltea las cebollas, agrega los champiñones, saca del fuego y reserva. En la misma sartén caliente, cocina mínimamente las espinacas (solo hasta que estén un poco más tiernas las hojas).

En un bowl combina los huevos, la ricotta (si decides usarla) y la leche. Agrega sal y pimienta, y mezcla bien.

Para armar el quiche, pon sobre la masa de la tarta la cebolla con champiñones, las espinacas, y el choclo. Vierte el batido sobre las verduras, y lleva al horno nuevamente por 25 minutos, a la misma temperatura, o hasta que el batido haya cuajado. Y ya está listo para disfrutar!

Nota: con la masa que te sobra puedes hacer unos palitos tipo grisines, y agregarle semillas por fuera para hacerlos más entretenidos. Los llevas al horno junto con el quiche y listo!